lunes, 28 de julio de 2008

Hitos de la Fuerza de Submarinos: Primer cruce del Cabo de Hornos y del Paso Policarpo Toro

En esta entrada daremos cuenta de dos hechos históricos en la Fuerza de Submarinos de Chile: La primera vez que una de sus unidades cruza el Cabo de Hornos, hecho que ocurrió en 1931, y la primera vez en que se cruza el Paso Policarpo Toro, en el año 2004.

1. Cruce del Cabo de Hornos:
El primero de estos histos lo sacamos de un artículo escrito por Pedro Sapunar Peric titulado "Primer Cruce del Cabo de Hornos en Submarino", publicado en la página web de la Cofradía de los Capitanes del Cabo de Hornos de Chile en su sección de Anécdotas Marineras.


A continuación, la transcripción del artículo:

Nuestro apreciado colaborador, Cofrade Honorario Sr. Pedro SAPUNAR Peric, quién se desempeñaba como Ingeniero Jefe del Departamento de Dragas y Maquinarias de la Dirección de Obras Portuarias de Chile, nos ha enviado una nota referida al primer submarino del mundo que cruzó el Cabo de Hornos, y que es el antiguo O'BRIEN. El hecho sucedio así:
"El 18 de marzo de 1931 la Escuadra de Evoluciones (nombre que tenía en aquella época la Escuadra Activa de la Armada) zarpó desde Puerto Montt, rumbo al sur del país, para desarrollar un programa de instrucción en la zona de los canales australes.
La Escuadra de Evoluciones, al mando del Contralmirante Alejandro GARCÍA CASTEBLANCO, en esa oportunidad estaba constituida por el Buque Madre de Submarinos ARAUCANO, (buque insignia), y los destructores VIDELA, HYATT, RIQUELME y ALDEA, más el submarino O'BRIEN, todas ellas flamantes unidades lanzadas al agua entre los años 1929 y 1930 en astilleros ingleses.
El 27 de marzo la Escuadra fondeaba en Punta Arenas y cuatro días después zarpaba de este puerto rumbo a la zona de Canal Beagle y Cabo de Hornos. Las recaladas fueron: Bahía Gente Grande, (isla Tierra del Fuego), donde permaneció hasta abril, Bahía Sholl (actual Bahía Morris), Canal Magdalena, Purto Burnt y luego, navegando por el Canal Beagle, Bahía Romanche, donde la formación naval fondeó el 04 de abril.
El 06 de abril a las 04:00 horas la Escuadra de Evoluciones zarpaba desde Bahía Goree rumbo al Cabo de Hornos, el cual fue avistado a las 07:45 horas. El submarino O'BRIEN, al mando del Capitán de Corbeta Sr. Gustavo SILVA, hizo inmersión a las 08:20 horas y a las 09:00 horas afloraba en las cercanías delm Cabo de Hornos, para luego continuar la navegación y fondear en Bahía Orange a las 17:20 horas. Se obtenía así para el arma Submarina Chilena, un récord mundial: el primer cruce del Cabo de Hornos por un submarino en la historia del mundo".

Fin de la transcripción.
El artículo contiene además las siguientes fotografías: La primera, del mítico Cabo de Hornos, la segunda, del submarino Clase O SS Thompson, igual al O'Brien, protagonista del histórico acontesimiento, y la tercera, de su comandante, Capitán de Navío Gustavo Silva.




















2. Cruce del Paso Policarpo Toro:
El año 2004 al submarino Simpson le fue asignada la más larga comisión en el extranjero que hasta entonces se había asignado a alguna unidad perteneciente a la Fuerza de Submarinos. La larga comisión se desarrollo en el Oceano Pacífico y duro 6 meses en los cuales el SS Simpson participó en la 19º versión del Ejercicio multinacional RIMPAC 2004 que bianualmente se desarrolla en el área de las islas Hawaii, para posteriormente trasladarse a San Diego, California, para participar en el Ejercicio Team Work North 2004 con unidades de la Armada de EE.UU. En total, la comisión duro 180 días, de los cuales 115 fueron en la mar, en la que se navegaron 18.596 millas, de las cuales 906,5 se realizaron en superficie y 17.685,5 bajo el mar.
La Comisión partió el 12 de mayo desde la Base Naval de Talcahuano en tránsito sumergido de 12 días hasta Isla de Pascua, ocasión que fue aprovechada para efectuar por primera vez la navegación de un submarino por el Paso Policarpo Toro, entre los islotes Motu Iti y Motu Noui. Luego de participar en actividades del "Mes del Mar", el SS Simpson partió en navegación sumergida de 26 días hasta llegar a la base Naval de Pearl Harbor en las islas Hawaii para tomar parte del RIMPAC 2004.

El tránsito por el paso Policarpo Toro fue inmortalizado por las cámaras, que como se aprecia en la esquina inferior derecha fueron tomadas a las 08:22 y 08:29 AM del día 24 de mayo, día en que el SS Simpson llegó a Isla de Pascua:


La primera fotografía fue subida por SSBN al foro Base Naval, y la segunda de esta secuencia, me la envio gentilmente por correo.


COMENTARIOS:
1.
Lamentablemente no he encontrado alguna fotografía que haya inmortalizado el histórico cruce del Cabo de Hornos por el SS O`Brien, y la verdad, ignoro si existe alguna. La foto del SS O`Brien que trae el artículo, naturalmente, no es de su tránsito por el Cabo de Hornos.
2. Lo que me interesa rescatar y resaltar mediante esta entrada, no es la existencia de estas verdaderas postales de la Armada de Chile con sus unidades cruzando el Cabo de Hornos o el Paso Policarpo Toro -muy hermosas, dichose de paso-, sino la importancia de la "presencia" de nuestra Armada en estos puntos geográficos de nuestro territorio nacional tan importantes y también distantes el uno del otro, el primero, casi al finalizar el continente americano y a un paso del continente Antártico, y el segundo, en medio del Pacífico Sur, a medio camino entre Sudamérica y Oceanía.
3. La importancia estratégica de estos puntos geográficos excede con creces el solo interés nacional o local, ya que su importancia es internacional y de una actualidad incuestionable. El Cabo de Hornos sigue siendo actualmente -al igual que el Estrecho de Magallanes y el Paso de Drake- una estratégica ruta marítima para los grandes petroleros y barcos de carga post Panamá, siendo también la ruta obligada de los portaaviones estadounidenses de la clase Nimitz que no caben por el Canal de Panamá. Por su parte, la Isla de Pascua, se encuentra en un punto medular en que domina un basto sector del Pacífico Sur, ya que es la porción de tierra más asilada que existe. En el presente siglo, el Océano Pacífico reemplazará al Atlántico en cuanto a importancia estratégica fundamentalmente por el gran crecimiento de las economías asiáticas, lo que traera como consecuencia un gran aumento del comercio marítimo entre Sudamércia y Asia, y donde la Isla de Pascua adquirirá gran relevancia estratégica como punto de vigilancia, control y seguridad de las nuevas rutas marítimas que surgiran.
4. La tremenda importancia de estos puntos -en los térmios referidos- le dan a nuestro país un rol estratégico y poder de influencia importante, ya que por un lado, domina los únicos pasos bioceánicos naturales que conextan a los oceános Atlántico y Pacífico, y por el otro, mediante Isla de Pascua -y también de las islas San Félix y San Ambrodio- domina gran parte de la cuenca Sudoriental del Oceano Pacífico.
5. Nuestro país -en el hámbito internacional- debe hacer respetar y valer su importante posición estratégica que le dan estos importantes enclaves de nuestro territotio nacional, y en tal objetivo, a la Armada le corresponde un rol ineludible y vital. En el cumplimiento de este objetivo, la Armada, es la institución llamada a ejercer la "soberanía disuasiva" en estos puntos extremos y lejanos de nuestro territorio nacional mediante la presencia permanente de sus unidades de combate.
6.Es por ello que, y cerrando la idea esbozada al comienzo, más importante que estas hermosas postales, es que revelan la "presencia" de la Armada en estos lejanos puntos de nuestro territorio, lo importante es que la Armada debe contar con los medios y la capacidad para operar en todo el territorio nacional y especialmente en dichas zonas, de una importancia y sensibilidad a los intereses nacionales incuestinable.
7. Los submarinos, son un importante instrumento disuasivo por sus especiales características de operación de las que no disponen otros medios.




sábado, 26 de julio de 2008

Retirada de la Flota de Mar Argentina. 22 de diciembre de 1978


En esta entrada publico un breve artículo del historiador Germán Bravo Valdivieso titulado “El temporal del 22 de diciembre de 1978” publicado en la sección “Temas de Hoy” del diario “El Sur” de Concepción en su edición del miércoles 02 de mayo de 2007, en el que argumenta que la flota de mar argentina no se retiró por causa de las malas condiciones marítimas aquel 22 de diciembre de 1978, día D de la “Operación Soberanía” por la cuál Argentina pretendía invadir a Chile y tomar por la fuerza de las armas las islas Picton, Nueva y Lenox que el laudo arbitral británico, mutuamente acordado, había entregado a la soberanía chilena.

Si bien el artículo descarta totalmente las condiciones climáticas como la excusa del retiro de la flota argentina, deja abierta la interrogante del por qué ésta rehusó enfrentarse con la Escuadra Nacional de Chile, que en aquel día salió rumbo a su encuentro y en la que estuvieron a escasas horas de entrar en combate.

A continuación, la trascripción del artículo acompañado de algunas fotografías que he agregado:


El Temporal del 22 de Diciembre de 1978

“A fines de diciembre de 1978 se recibió en el Ministerio de Relaciones Exteriores una información urgente que indicaba que la flota de mar argentina (Flomar) se encontraba a 200 millas de la zona del Beagle, para realizar desembarcos en algunas de las islas que reclamaban.

La ofensiva militar argentina se iniciaría el viernes 22 de diciembre a partir de las 22:00 horas, en que la Flomar y la infantería de marina ocuparían las islas Wollaston y Hornos. Dos horas después se desembarcaría en las islas Picton, Nueva y Lenox.

En nuestro País, el vicealmirante Raúl López Silva había sido designado comandante en Jefe de la Escuadra para prepararla en una carrera contra el tiempo. La componían el crucero “Prat” como buque insignia, los destructores misileros “Williams” y “Riveros”, las fragatas misileras “Lynch” y “Condell”, los destructores artilleros Portales”, “Zenteno” , “Cochrane” y “Blanco”, el petrolero “Araucano”, el remolcador “Sibbald”, los submarinos “Hyatt” y “Simpson” y el crucero “Latorre” que se le uniría posteriormente.

Crucero Capitán Prat.

Fragata Misilera Almirante Lynch.

La fuerza oponente estaba formada por el portaaviones “25 de Mayo”, el crucero “Belgrano”, los destructores “Almirante Storni”, “Almirante Domecq García”, “Py” y “Piedrabuena”, los destructores misileros “Bouchard” y “Seguí”, las lanchas misileras “Intrépida” e “Indómita”, basadas en Ushuaia y los submarinos “Salta” y “San Luis”.

Portaaviones ARA 25 de Mayo con sus aviones Skyhaeks A-4 sobre la cubierta de vuelo.

Crucero ARA General Belgrano.

Al vicealmirante López se le presentaba un complejo problema, pues si la Escuadra chilena daba el primer golpe, aniquilando al adversario y arrebatándole el dominio del mar, obtendría una posición táctica muy superior a que si esperaba el ataque argentino, pero nuestro país quedaría como agresor, condición que redundaría muy negativamente en los organismos internacionales.


La Escuadra Chilena zarpa al encuentro

Ordenó zarpar a sus buques para ir al encuentro de la Flomar que se encontraba a cuatro horas de detección electrónica y a seis de alcance de fuego.

El personal de la Escuadra chilena se encontraba animoso, deseoso de medirse con la Flomar y descansado, pues habían pasado los últimos días en sus fondeaderos de guerra.

En cambio, la flota argentina enfrentaba mal tiempo con un mar encrespado y olas de doce metros que afectaban su capacidad operativa. El portaaviones “25 de Mayo” no pasaría más que ser un blanco para el enemigo o un estorbo, pues con este clima sus aviones no podrían despegar.

Tampoco Argentina podía pretender operaciones de desembarco con esas marejadas y una infantería de marina totalmente mareada, que llevaba días en sus naves sacudidas por las olas.

La Aviación Naval chilena detectó a las 08:15 horas del 20 de diciembre que la Flomar invertía su rumbo hacia el norte, por lo que la Escuadra chilena regresó a sus fondeaderos de guerra.

A las 19:19 horas del jueves 21, nuevamente nuestros aviones detectaron a los buques argentinos en dirección al Cabo de Hornos, casi frente de las islas que pensaban invadir. No había nada que se interpusiera entre ellos y su objetivo, más que el submarino “Simpson”, única unidad chilena de ese tipo operativo en ese momento, que esperaba sumergido y con sus torpedos listos, para su aproximación.

En las primeras horas del viernes 22, la Escuadra chilena inició su desplazamiento, sabía lo que tenía que hacer; pero el almirante Merino le trasmitió un mensaje, sin ninguna codificación, como era lo habitual, que decía: “zarpar de inmediato y entrar en combate con los argentinos”.

Evidentemente no se trataba de un error haberlo trasmitido sin cifrar, sino que una advertencia a la Flomar que nuestra Escuadra entraría en acción.


La escuadra argentina se retira

Avanzaban los buques chilenos al encuentro de los argentinos, cuando nuestros aviones navales informaron que a las 13:22 horas la Flomar había cambiado rumbo nuevamente para regresar a su base y tres minutos más tarde lo hacía el grupo anfibio.

Todos los historiadores argentinos han insistido que la retirada de la Flomar se debió a la magnitud del temporal que debieron enfrentar y el embravecido mar que no permitía las operaciones; pero el recuerdo del comandante del destructor Cochrane, que formaba en la vanguardia de la Escuadra chilena, es que las condiciones de tiempo eran más o menos las habituales de la zona. Y, a mayor abundamiento, se ha revisado el libro bitácora de su buque, que se encuentra en el archivo naval, donde se indica que la fuerza del viento era 4 del sur o suroeste; esto es, no era temporal y su dirección era típica de las buenas condiciones climáticas.

¿Qué hizo a los argentinos desistir de la invasión? ¿Fue la llegada del cardenal Samoré a Buenos Aires? ¿Fue el mensaje sin cifrar del almirante Merino, que les hacía ver la decisión chilena de enfrentarse?. Lo que está claro es que el desatado temporal a que lo han atribuido los cronistas argentinos fue en la primera incursión del día 20, pero el 22 había amainado y se esperaba buen tiempo.”.